por COLABORADORES: Aline Peçanha Oliveira, Andrea Ladeira Liboni, Anita Viudes Freitas, Cristina Façanha Soares, Eliana Olinda Alves, Elizabete Baptista de Godoy, Ellen Cristina Del Grande, Fabiana de Sá Luque Bastos, Jonathas Cesar Müller Gomes, Josiane Assis Pareja , Leila Oliveira Costa, M. Lucia Peçanha, Pompeia Villachan-Lyra, Sylvia Nabinger, Tania Fukelmann Landau. TRADUCCIÓN: Silvana Deangelis
Presentación
En el camino de reconocimiento de los niños como seres humanos en desarrollo, el Brasil es reconocido como uno de los países más avanzados del mundo en términos de legislación. Se destaca en este viaje histórico, nuestra Constitución Federal de 1988, que en su artículo 227 instituye la regla de la prioridad absoluta de la familia, la sociedad y del Estado de garantizar a los niños, adolescentes y jóvenes el derecho a la vida, la salud, la alimentación, la educación, el ocio, la formación profesional, la cultura dignidad, respeto, libertad, convivencia familiar y comunitaria, y ponerlos a salvo de toda forma de negligencia, discriminación, explotación, violencia, crueldad y opresión.
Nuestro país, a través de la participación activa en el escenario internacional, ha contribuido significativamente a la Convención sobre los Derechos del Niño, aprobada por la ONU el 20 de noviembre de 1989 y ratificado en Brasil por el Decreto 99.710 del 21 de noviembre de 1990. Esto representó un salto paradigmático con la sustitución del Código de Menores de 1979 por el Estatuto del Niño y del Adolescente – Ley 8069, del 13 de julio de 1990, además de contribuir sustancialmente a la Convención sobre la protección de los niños y a la cooperación en materia de adopción internacional, concluido en La Haya el 29 de mayo de 1993 y ratificada en el Brasil por el Decreto 3.087 de 21 de julio de 1999.
Tras el debate sobre la garantía de los derechos del niño, el 8 de marzo de 2016, se promulgó Ley 13.257, una ley inédita en el mundo, conocida como el Marco Legal de la Primera Infancia. Esta Ley establece principios y directrices para la formulación y aplicación de políticas públicas de la Primera Infancia, teniendo en cuenta la especificidad y la relevancia de los primeros años de la vida en el desarrollo infantil y el desarrollo humano. En consonancia con los principios y directrices del Estatuto del Niño y del Adolescente (ECA), cambia este dispositivo legal, al igual que el Código de Procedimiento de Derecho Penal, el CLT, la Ley de Empresas Ciudadanas y la Declaración de Nacido Vivo.
El Estatuto del Niño y del Adolescente nos presenta una Doctrina de Protección Integral, reconociendo el niño como sujeto de derechos y como persona en un momento particular del desarrollo. El Marco Jurídico de la Primera Infancia amplía esta perspectiva de protección enfatizando las estrategias de promoción del desarrollo integral. Esta ley destaca la importancia de las inversiones en políticas integradas y acciones intersectoriales, de acuerdo con su Art. 6: «La Política Nacional Integral para la Primera Infancia se formulará y aplicará mediante un abordaje y una coordinación intersectorial que articule las diversas políticas sectoriales desde una visión integral de todos los derechos del niño en la Primera Infancia”.
Desde la premisa de la intersectorialidad, el Marco Jurídico exige a todos los agentes de protección actuar de manera integrada en el apoyo a las familias, para el ejercicio de la función de cuidado, protección y educación de los niños, permitiendo la promoción del desarrollo pleno, en la etapa más decisiva de la formación humana, que es la primera infancia. Como afirma la Dra. Sylvia Nabinger, presidenta de la Asociación Pikler Brasil, «es a los pies del niño que camina el futuro de la Nación».
Al hacer hincapié en la prioridad absoluta de la atención de calidad en la Primera Infancia, el Marco Jurídico también apoya el derecho a la formación permanente de quienes trabajan con mujeres embarazadas y niños de hasta seis años. De acuerdo con el Art. 10 – «Los profesionales que trabajan en los diferentes ámbitos de ejecución de políticas y programas destinados a los niños en la Primera Infancia tendrán acceso garantizado y prioridad a la calificación, en forma de especialización y actualización, en los programas que tienen en cuenta, entre otros temas, la especificidad de la Primera Infancia, la estrategia de la intersectorialidad en la promoción del desarrollo integral y la prevención y protección contra todos forma de violencia contra el niño».
En el ámbito educativo, es importante destacar los avances y logros de la Educación Infantil, considerados la primera etapa de la Educación Básica, cuyo derecho está garantizado por la Ley de Educación (LDB, 1996) y reafirmado en las Directrices del Plan de Estudios Nacional para la Educación de la Primera Infancia (DCNEI, 2009). Estos documentos, de acuerdo con los conceptos y principios señalados antes, afirman el compromiso de la Educación de la Primera Infancia con el pleno desarrollo del niño hasta los cinco años, en sus aspectos físicos, psicológicos, intelectuales y sociales, además de la acción familiar y comunitaria. Según la ley, debe ofrecerse en jardines de infancia y preescolares, que se caracterizan por ser espacios institucionales no domésticos, público o privado, que educan y cuidan a los niños de 0 a 5 años (BRASIL, 1996); 2009.
La concepción de niño, sujeto de derechos, histórico, competente, activo y capaz, expresada en los Diseños Curriculares Nacionales para Educación Infantil (BRASIL, 2009), exige la elaboración de propuestas pedagógicas basadas en dos ejes estructurantes (juego e interacciones), con el objetivo de «garantizar el acceso del niño a los procesos de apropiación, renovación y articulación del conocimiento y aprendizaje de diferentes lenguajes, así como el derecho a la protección, a salud, libertad, confianza, respeto, dignidad, juego, coexistencia e interacción con otros niños». (BRASIL; 2010).
La Red Pikler Brasil y su compromiso con los derechos del niño en la Primera Infancia, frente la pandemia de COVID-19
Frente a este amplio debate sobre la promoción y garantía de los derechos de los niños y adolescentes, la Red Pikler Brasil (RPB) se siente llamada a participar, reconociendo la importancia de esta agenda. La Red Pikler Brasil, asociada a la Red Pikler Internacional, comenzó sus actividades en 2012 con el objetivo de difundir las ideas de la Dra. Emmi Pikler (1902-1984) entre educadores, especialistas y profesionales de la Educación, la Salud, la Asistencia Social, el Sistema de Justicia, entre otros.
La consolidación de las ideas de la Dra. Emmi Pikler, resultado de 70 años de rigurosa investigación, con niños de cero a tres años, la Primera Infancia, se conoció en varios países como el Abordaje Pikler.
Uno de los principios clave del Enfoque es el respeto por la singularidad y el ritmo de desarrollo del niño. Este Principio está en consonancia con el Marco Jurídico para la Primera Infancia en el Artículo 4 (III), que subraya la importancia de «respetar la individualidad y los ritmos del desarrollo de los niños (…)». Frente a esta afirmación jurídica, podemos destacar las contribuciones de gran relevancia de los estudios realizados por Emmi Pikler. Estos estudios tienen como objetivo promover las acciones de cuidado y educación, también recomendadas en LDB y DCNEI, porque traduce en la práctica lo que significa que el niño es una persona en desarrollo con condiciones de participación, según cada grupo etario. Esto requiere una atención personalizada, vínculos afectivos estables y un entorno seguro para descubrir el mundo, jugar, interactuar y construir tu identidad. Por lo tanto, la Red Pikler Brasil, actuando con las premisas de las legislaciones brasileñas relacionadas con y en los principios que trajo el enfoque Pikler, no pudo evitar contribuir ese debate. También hay que destacar que la RPB presente en el país desde hace décadas se ha comprometido a con el desarrollo integral e integrado de bebés y niños pequeños y la garantía de sus derechos, asegurados por las leyes que rigen la educación nacional.
En este momento en que nos enfrentamos a los desastrosos efectos de la pandemia de COVID-19 devastador en Brasil, RPB y la Asociación Pikler Brasil (APB) vienen a dialogar y contribuir a los debates que provienen de diversos sectores de la sociedad, como la educación, la salud, la asistencia social, para garantizar los derechos inherentes a la calidad de vida de nuestros hijos. En esta perspectiva, pensar en el regreso de los bebés y niños pequeños a las actividades cara a cara (presenciales) ha desafiado a todos los involucrados para encontrar soluciones que satisfagan sus intereses, deseos y necesidades de los pequeños para interactuar, saber cómo jugar, moverse, explorar y vivir experiencias en diferentes lenguajes, así como el de sus familias, de una manera segura.
Con el objetivo de contribuir a la toma de decisiones para un retorno seguro y de calidad para los niños, profesionales de la educación y las familias, nos guiamos por los cuatro principios fundamentales del Abordaje Pikler formando una unidad inseparable y coherente:
Estos principios, que no son sólo de importancia en la verticalidad de los bebés y niños pequeños sino que también se articulan para generar un entorno socio-emocional equilibrado, promoviendo los derechos recomendados por el Abordaje Pikler, que guía las acciones de aquellos que cuidan y educan a los bebés y niños pequeños. Ellos son:
La importancia de la actividad autónoma y la total libertad de movimiento basada en la propia iniciativa del niño: Moverse en libertad.
La importancia de la actividad libre iniciada por la propia iniciativa del niño, que el niño lleva a cabo libremente de una manera autónoma tiene un valor fundamental para el desarrollo de los niños. Con ello aprende a: observar, actuar, usar su cuerpo, percibir los límites de sus posibilidades, modificar el movimiento, sus actos; aprende a aprender, es decir, a desarrollar sus propias competencias.
Realizar acciones competentes, utilizando el repertorio de conductas que tiene a su disposición en una determinada fase de su desarrollo es importante para desarrollar el valor positivo y el conocimiento de sí mismo.
- El movimiento libre es un principio transversal. Está presente en los momentos de atención personal -alimentarse, cambiarse, bañarse y dormir, así como jugar o cualquier otra acción cotidiana.
La importancia de las relaciones afectivas estables en un contexto institucional: Relación afectiva y calidad de cuidado.
La importancia de las relaciones personales estables del niño – y entre ellas, el valor de la relación con una persona en particular – el educador de referencia- que es el adulto al cual el niño busca e informa, y le ofrece una atención individualizada y continua en diferentes situaciones, incluyendo las de cuidado individualizado, durante los momentos de atención personal.
Todo el equipo hace un esfuerzo constante por conocer la forma y la calidad de la atención que se le ofrece al niño, con el fin de garantizar la seguridad y el bienestar.
La creación de un clima afectivo positivo para los niños les permitirá participar en el entorno según su grado de interés, – determinado por la madurez funcional y la riqueza de los experimentos y experiencias anteriores, entendiendo que la actividad autónoma guía la acción de aquellos que cuidan del niño estableciendo las condiciones para esta actividad.
La importancia de hacer que los niños sean conscientes de sí mismos y de su entorno de una manera positiva: Conciencia de sí mismo y de tu entorno.
La importancia de la regularidad, la estabilidad y la atención individualizada en los eventos cotidianos, favorece la toma de conciencia del bebé o niño pequeño, tanto para saber quién es, qué está ocurriendo, quién se ocupa de él, cuáles son las características de su entorno, cuál es la situación tanto hacia el futuro como en el presente inmediato, especialmente en los niños más grande.
Solicitarle al niño una participación activa durante los cuidados personales no sólo ayuda para que se perciba a sí mismo, sino también para conocerse, expresarse, tomar decisiones y afirmarse como persona.
Una aspiración constante es el hecho de que, cada niño, teniendo una imagen positiva de sí mismo, y de acuerdo con su nivel de desarrollo, aprenda a conocer su situación, su historia personal, su entorno social y material, los acontecimientos que la afectan, que constituyen su identidad personal.
La importancia del estado de salud del niño: Bienestar y vida saludable.
La importancia de la salud física del niño no es sólo la base de los principios precedentes, sino también el resultado de ellos.
El reconocimiento de que el niño es considerado y tratado, desde el principio de la vida, como una persona en desarrollo constante y, al mismo tiempo, como una persona completa en cada momento de la vida cuyas necesidades esenciales para una vida sana cambian con su desarrollo.
Una atención de buena calidad garantiza que las necesidades esenciales del niño sean satisfechas, y que vaya adquiriendo una sensación de seguridad y de confianza ligada a las experiencias positivas vivenciadas en los diferentes momentos de su vida diaria.
Es importante destacar que el equilibrio afectivo y el desarrollo del niño se consideran como factores de salud en el Abordaje Pikler. La vida al aire libre es un factor esencial y un rasgo dominante en la conducta de la institución. Y las prácticas preventivas de control de epidemias e infecciones no deberían amenazar la seguridad emocional de los niños.
Además de estos principios, también destacamos la Declaración de los Derechos del Niño, postulada por el Asociación Pikler-Lóczy y que coinciden con la actual legislación brasileña:
Cada niño en un jardín de infantes tiene los siguientes derechos:
- Derecho a ser aceptado en su singularidad, a ser tratado con comprensión, cuidado y respeto y a ser protegido de cualquier manifestación de violencia, implícita o explícita, ya sea física o verbal;
- Derecho a disfrutar de una relación atenta, amistosa y de apoyo por parte de los adultos cuidadores, que lo conocen y tienen en cuenta sus necesidades físicas y psíquicas;
- Derecho a una vida sana, a que se vele por su bienestar físico, cuidando su dieta, ropa y momentos de descanso, así como también sus actividades y juego al aire libre, siempre de acuerdo con sus necesidades individuales;
- Derecho a recibir atención personal sin prisas, y a experimentar un tratamiento individualizado, personal y delicado durante la satisfacción de sus necesidades físicas;
- Derecho a la continuidad y estabilidad de sus relaciones personales, condiciones de vida y de su entorno físico, y a que los eventos de su vida diaria sean predecibles y previsibles. El niño tiene derecho a influir en su entorno y así desarrollar una imagen positiva de sí mismo;
- Derecho a que se observe y que se promueva su desarrollo, respetando su ritmo individual, sin confrontarlo con expectativas más allá de su nivel de madurez;
- Derecho a tener oportunidades para su actividad autónoma, que sean apropiadas y suficientes para desarrollarse a partir del libre movimiento y el juego, descubriendo su entorno por sí mismo según sus iniciativas y con el acompañamiento de un adulto interesado en sus deseos y descubrimientos;
- Derecho a recibir apoyo para que se sienta bien y seguro dentro de un grupo pequeño de niños en su proceso de socialización, teniendo en cuenta sus posibilidades de coexistencia y la interacción con sus compañeros;
- Derecho a expresar sus emociones, compartiendo su alegría y su dolor en un ambiente empático, para consolarlo cuando sea necesario y ayudarlo a dominar sus impulsos;
- Derecho a recibir de los adultos que lo cuidan un apoyo que constituya un puente entre la escuela y el hogar, a través de los cuales los padres pueden seguir los eventos de su día y poder sentir que, durante el tiempo que permanece en la escuela, lo más importante es su familia.
Sugerencias para la atención humanizada
En el cambio histórico que nos afecta a todos como resultado de la pandemia de COVID-19, el acceso a la información de forma horizontal y una búsqueda atenta y agregada de cuidadores profesionales determinará el camino de cada institución con la aplicación de nuevos protocolos de retorno a las actividades. Cada profesional necesitará un espacio de escucha calificado, para que pueda ir asegurándose de sus límites y posibilidades. Entendemos que es fundamental, en primer lugar, cuidar de los que cuidan.
En este momento de transformación social con impacto en todas las políticas públicas, pensar en la seguridad y la calidad de los espacios de la escuela, prevé una adecuada apropiación de la higiene y limpieza, pero también y sobre todo requiere una postura y participación profesional que asegure al afecto como una herramienta para la calificación del cuidado.
Basado en los principios rectores del Abordaje Pikler, y en consonancia con las leyes de protección de los niños, entendemos que en un momento de reanudación de la rutina institucional, debemos pensar y actuar los cuidados a través de manos amables, de cuerpos llenos de integridad afectiva, de reflexión de un cuidador adulto atento a las necesidades de salud física y emocional de los niños.
La Red Pikler Brasil invita a todos los profesionales que están en contacto con niños en este proceso para volver a las actividades cara a cara (presenciales) centradas en la Primera Infancia, para afirmar el compromiso de respeto por el bebé y el niño, reconocido como una persona en desarrollo, lo que requiere una atención personalizada, establecida a través de una relación afectiva con su cuidador adulto.
Esta lista de buenas prácticas de prevención, recomendadas por los organismos de salud, se presentan aquí incentivadas por el desafío y el compromiso de asegurar el derecho del niño y la atención a las familias, a la luz del Abordaje Pikler.
De los cuidados de bioseguridad contra Covid-19
Los objetivos esenciales de las acciones preventivas propuestas en este protocolo de atención son la construcción de un sentido colectivo de prevención y reducción de los riesgos de transmisión por contacto directo de persona a persona, e indirectamente, de persona a entorno de persona.
El sentido colectivo de la prevención se entiende como el efecto positivo generado por un nuevo comportamiento frente a las buenas prácticas de prevención. Cuando se practican de manera mutua, cultivan el respeto a la vida del otro al mismo tiempo que somos respetados y cuidados. A partir del control de la temperatura diaria, el distanciamiento social, la individualización de pertenencias y objetos, y la práctica correcta de la etiqueta (protocolo) respiratoria (lavado de manos con jabón, toser en el codo, utilizar máscaras/barbijo, etc), podemos promover un ambiente seguro, tanto desde el punto de vista de la recepción como del sanitario, de gran importancia para este momento.
La información amplia y transparente sobre la enfermedad de Covid-19, la organización de pequeñas reuniones para darle voz al equipo (institucional) y claridad sobre la transmisión predominantemente por contacto respiratorio, también constituyen una importante forma de recepción y seguridad; gradualmente la toma de conciencia va ganando espacio.
Sabemos que la guardería es un lugar de múltiples interacciones. Los bebés se encuentran con los otros, con objetos y con espacios. Los espacios y las interacciones que tienen lugar en la guardería forman un todo al que llamamos ambiente.
Desde una perspectiva pikleriana, las organizaciones en los entornos de una institución necesitan cumplir con las múltiples particularidades, singularidades y necesidades de los bebés y, entre estas necesidades está la «buena salud».
La nueva realidad nos presenta dos desafíos principales: ¿Cómo cuidar los espacios para que la salud tenga su lugar, sin embargo, manteniendo la calidad de las interacciones?
En este sentido, vemos que este desafío puede ser una posibilidad de tomar el rumbo en dirección a una postura que, aunque diferente, es deseable ya que permitirá otras manifestaciones de movimiento libre, de jugar en forma autónoma y con cuidados de calidad.
Las nuevas sugerencias establecen que:
- La alimentación debe realizarse en pequeños grupos.
- Que el espacio exterior sea utilizado la mayor parte del tiempo.
- Las ventanas deben estar abiertas y ventiladas.
- Que la cantidad de niños por grupo sea menor y que cada uno de estos pequeños grupos tengan educadores de referencia.
- También se debe tener especial cuidado en las áreas de sueño y descanso.
Vemos que estas son orientaciones que han estado promoviendo la salud durante algún tiempo, pero además permiten una mejor interacción entre los adultos y los niños y entre los propios niños.
Lo que sigue a continuación es un complemento «paso a paso» de lo que se mencionó anteriormente y se alineó con las recomendaciones prácticas para el cuidado de la salud.
Acceso a la institución y distancia social:
- Atención a la temperatura corporal de adultos y niños en la recepción.
- Higienizar las manos de todos con alcohol en gel dermatológico al 70%.
- Uso de barbijos para adultos.
- Limitación de las visitas durante el período crítico de la enfermedad.
- Señalar los espacios cada 1,5 m, de forma agradable.
- Identificar los posibles transmisores mediante una breve entrevista.
- Preservar a todos los que se ajustan a un grupo de riesgo.
- Siempre que sea posible, mantener a los mismos profesionales con los mismos niños.
- A la hora de las comidas asegurar la distancia entre los niños.
La individualización de objetos y pertenencias
Uno de los grandes desafíos es la condición de individualizar al máximo los juguetes y pertenencias de los niños en la comunidad de la guardería/jardín maternal.
Garantizar:
- Cajas de juguetes individuales.
- Delantales, kits de pintura, materiales para actividades y otros similares, separados para cada niño por nombre y clase.
- Identificación y guarda individual del ajuar de los niños, incluyendo mantas y accesorios.
- Tazas de agua de un solo uso e individuales.
- Ofrecer cubiertos y servilletas protegidas individualmente.
Protección profesional
- La unidad debe tener un lugar para lavarse las manos con agua corriente, jabón y toalla de papel.
- Fomentar el uso de barbijos a cambiar cada dos horas.
- Para la higiene ambiental y el personal de cocina las máscaras deben ser de tipo quirúrgico cuando se usan en limpieza, y el uso simultáneo de máscaras de PFF2 para la limpieza de áreas críticas.
- Contar con un lugar adecuado para la eliminación de las máscaras quirúrgicas (cada dos horas), y mantener el uso de guantes, zapatos de seguridad y botas de goma.
- Se recomienda cambiar toda la ropa al llegar al entorno escolar por ropa (uniforme) de uso exclusivo en ese lugar, así como también el calzado.
- Se aconseja a todos los adultos que tengan un calendario de vacunación al día.
La higiene y la salud del niño
- Siempre lávese las manos con agua corriente y jabón, en varios momentos de la rutina, como por ejemplo cuando se cambian las actividades o se cambian los espacios dentro de la escuela.
- Mantener la higiene nasal y la hidratación oral constantes.
- Mantener las medidas de higiene recomendadas para el baño y los intercambios con mayor atención al contacto de la nariz y la boca del niño.
- Mantener una rutina de cepillado de dientes y cambios de ropa con mayor atención al contacto respiratorio.
- Mantenga los objetos personales siempre identificados y almacenados individualmente.
- Proporcionar y asegurar que la mayoría de las actividades sean al aire libre, respetando el tiempo de exposición al sol.
- Remisión al servicio médico ante todos los signos y síntomas de enfermedades respiratorias.
- Asegurar el control efectivo de la vacuna.
La higiene del medio ambiente
- Intensificar la limpieza de las áreas comunes como pasillos, baños, comedores, no menos de dos veces por turno.
- Recoger los residuos (basura) con mayor frecuencia.
- Lavar las superficies con agua y detergente seguido de una desinfección con alcohol al 70% para los bancos y superficies e hipoclorito para los pisos, baños, cambiador y sala de salud (enfermería).
- Plastificar los dispositivos electrónicos para facilitar su limpieza y desinfección.
- Restringir el uso colectivo de objetos (tijeras, grapadoras, bolígrafos, etc.)
- Mantener una amplia ventilación natural (puertas y ventanas abiertas), siempre.
- Sanear todos los entornos escolares al final del curso.
Considerando los principios generales del Abordaje Pikler, así como los cuidados de la salud arriba mencionados que es preciso tener en cuenta en este proceso de regreso a las actividades cara a cara (presenciales), entendemos que es crucial no perder la ternura.
Los niños deben tener garantizado el derecho a la salud, así como el mantenimiento de las relaciones sociales y la calidad afectiva, impregnada de amor, libertad de expresión, exploración y movimiento, y el respeto por la singularidad de cada uno.
Entendemos que el gran diferencial para asegurar la calidad de estas relaciones está en la forma cómo se llevará a cabo esa atención sanitaria en el día a día de las actividades institucionales. Para ello debe garantizarse una red de apoyo y atención a todos los adultos que participan en el cuidado de los niños para que, una vez cuidados ellos, también puedan «cuidar bien». Asegurar esta red de apoyo es ofrecer información científica y transparente, organizar tiempos y espacios para una escucha calificada y sensible, acogiendo sus dudas, miedos e ideas, así como también protegiendo su salud física y su bienestar.
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Aline Peçanha Oliveira – Trabajadora Social graduada por la UFRJ, especialista en Trabajo Social y Salud Mental, directora de una Unidad de Recepción del Ayuntamiento de Río de Janeiro. Consultora y fundadora de Meu Quintal Consultorias, Miembro de la Red y de la Asociación Pikler Brasil.
Andréa Ladeira Liboni – Pedagoga y Psicopedagoga. Directora pedagógica de Educación Infantil del Colegio Villacor. Miembro de la Red y Asociación Pikler Brasil.
Anita Viudes Freitas – Master en Educación, Historia, Política y Sociedad por la PUC/SP, profesora del Curso de Pedagogía del Centro Universitario de Sumaré, miembro fundador de la Asociación Pikler Brasil, miembro de la Red Pikler Brasil y la Red Pikler Nuestra América.
Cristina Façanha Soares – Pedagoga, Master y Doctora en Educación Brasileña. Profesora Adjunta de la Facultad de Educación (FACED) en la Universidad Federal de Ceará (UFC). Desarrolla actividades de investigación, enseñanza y extensión sobre la educación de la infancia, la niñez y la primera infancia. Coordinadora del Grupo de Estudios sobre el Diálogo con el enfoque Pikler: estudios e investigaciones con bebés y niños muy pequeños. Miembro de la Red y la Asociación Pikler Brasil y la Red Pikler Nuestra América.
Eliana Olinda Alves – Doctorado y Maestría en Psicología de la Universidad Federal Fluminense (UFF), Psicóloga del TJRJ, Profesora del Curso de Especialización en Psicología Jurídica, PUC-Rio, Miembro fundadora y el Consejo Fiscal de la Asociación Pikler Brasil, Miembro de la Red Pikler Brasil y Nuestra América.
Elizabete Baptista de Godoy – Pedagoga que actuó como maestra y coordinadora pedagógica en la red educación municipal. Participa en el Foro Municipal Asesor de Educación Infantil de São Paulo-FEMEISP en el Centro de Formación e Investigación en Educación de Tesituras, Miembro de la Red y de la Junta Asesora y el Comité de Entrenamiento de la Asociación Pikler Brasil.
Ellen Cristina Del Grande – Enfermera. Especialista en prevención y control de infecciones en las áreas de interés a la Salud por UNIFESP, Red de Miembros y Asociación Pikler Brasil. Gerente de enfermería en Núcleo de Salud UNIEPRE.
Fabiana de Sá Luque Bastos – Pedagoga con especialización en Educación Inclusiva y Educación Lúdica. Mejora del curso Relación padre-bebé: de la observación a la intervención. Académica del desarrollo niños de 0 a 3 años con enfoque en el Abordaje Pikler. Miembro de la Red y de la Asociación Pikler Brasil.
Jonathas Cesar Müller Gomes – Pedagogo con especialización en educación de 0 a 3 años, actuó como Gerente de CEI, es asesor de Educare Assessoria e Consultoria Pedagógica, miembro de la Red Pikler Brasil y Red Pikler Nuestra América.
Josiane Pareja – Pedagoga durante 36 años. Estudiosa de los enfoques de Pikler y Reggio Emilia desde 2007. Formó parte del grupo de estudio con Myrtha Chokler durante 5 años, Protoinfancia. Miembro de la Red y de la Asociación Pikler Brasil. Fundador y director de Ateliê Carambola Escola de Infância y Ateliê Centro de Pesquisa e Documentación pedagógica desde 2014.
Leila Oliveira Costa – Pedagoga y Master en Educación en Unicamp. Terapeuta Sistémico Familiar. Miembro de la Red y miembro fundador de la Asociación Pikler Brasil.
M Lucia Peçanha – Pedagoga y especialista en educación infantil. Estudiante del enfoque Pikler desde 2004. Miembro de la Red y de la Asociación Pikler Brasil, actuando como Vicepresidente. Miembro de Red Pikler Nuestra América y la Asociación Pikler Lóczy Francia.
Pompéia Villachan-Lyra – Psicóloga, Neuropsicóloga, Master y Doctora en Psicología. Maestro en Universidad Federal Rural de Pernambuco (UFRPE) y PPG en Educación, Culturas e Identidades (Master). Coordinador del NINAPI (Núcleo de Investigação em Neuropsicologia, Afetividade, Aprendizagem e Infancia temprana). Consultor en el campo de la primera infancia. Miembro de la Red Pikler Brasil.
Sylvia Nabinger – Derecho de Familia, Técnico en Salud Mental, Terapeuta Familiar. Consultor internacional para la infancia. Profesor invitado en la Escuela de la Fiscalía de la RS. Trabajador social jubilado del Juizado da Infância de Porto Alegre. Miembro fundador de la Red Pikler Brasil y Presidente de la Asociación Pikler Brasil.
Tania Fukelmann Landau – Pedagoga de la PUC – SP y especialista en Educación Lúdica del ISEVEC. Trabaja en la formación continua de los educadores. Fundadora y actual directora de Converso Educação. Miembro de la Red Pikler Brasil y la red Pikler Nuestra América.
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*Silvana Deangelis es Fonoaudióloga-UDA; Licenciada en Psicomotricidad-UNCuyo; Especialista en Desarrollo Infantil Temprano-UNCuyo; Psicomotricista, cargo titular docente en la modalidad de Educación Especial, Dirección General de Escuelas-Mendoza; Profesora Tutora en el Posgrado de Especialización en Desarrollo Infantil Temprano, Universidad Nacional de Cuyo- Facultad de Educación; Editora Responsable de la página web de la Red Pikler de Nuestra América: www.piklerna.org; Miembro de La Red Pikler de Nuestra América. Actualmente se está formando en Psicología Social.
